Este jueves la Comisiones legislativas de Procuración y Administración de Justicia, así como de Protección Ambiental y Cambio Climático, iniciaron el análisis de 2 iniciativas presentadas por el PAN, en materia de maltrato animal; y otra para considerar como maltrato animal el aislamiento de animales en azoteas, zotehuelas, balcones, terrenos baldíos o vehículos, las cuales buscan reformar el Código Penal del Estado de México y del Código de Biodiversidad del Estado de México.
Las nuevas iniciativas se suman a las que previamente había
presentado el PRD, en materia de envenenamiento y mutilación estética en
animales; y otra en materia de proliferación de agentes infecciosos para la
salud de otros animales o de las personas. También sobre cultura de respeto y
cuidado para combatir la crueldad animal, el abandono y las omisiones de
cuidado.
Al presentar las iniciativas en la lectura, se destacó que Tecámac,
Ecatepec, Nezahualcóyotl, Toluca, Tlalnepantla, y Naucalpan, son los municipios
con mayor número de reportes por maltrato animal, ya que hasta mayo de 2023 se
habían iniciado 103 carpetas de investigación por ese delito.
Aunado a ello, durante la pandemia, la Procuraduría de
Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem) recibió 5 mil 649
denuncias por agresiones contra animales, del 2020 al 2022 se presentó un
aumento del 30% de agresiones a los animales de compañía, en los hogares
mexiquenses.
Así, por la falta de interés y la indiferencia ante el dolor
de estos seres vivos, se busca adicionar como maltrato animal el aislamiento de
los animales, amarrado en azoteas, zotehuelas, balcones, terrenos baldíos o
vehículos, sancionado con una pena de 6 meses a 4 años de prisión y de 150 a
300 días de multa.
La segunda iniciativa presentada busca sancionar con una
pena de 6 años de prisión y 500 días de multa, a quien abandone a cualquier animal poniendo en
riesgo su integridad; también, a quién realice actos sexuales o eróticos a un
animal, y la pena se incrementará hasta en una mitad cuando el maltrato animal
sea fotografiado, videograbado o difundido.
Finalmente, se propone una pena de7 años de prisión y de 600
días de multa, a quien por acción u omisión cause la muerte no inmediata a un
animal, utilizando cualquier medio que prolongue la agonía; la pena se
incrementará en una mitad cuando el acto sea cometido por servidores públicos
que tengan por encargo el manejo de animales.
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